La ley de la negación de la negación da a conocer la
dirección general, la tendencia, del desarrollo del mundo material.
Para comprender la esencia y alcance de esta ley de debe
poner en claro, ante todo, que es la negación dialéctica y que lugar ocupa en
el desarrollo.
En cualquier campo de la realidad material se opera
constantemente el proceso de muerte de lo viejo, caduco, y nacimiento de lo nuevo,
progresivo. La sustitución de lo viejo por lo nuevo, de lo que muere por lo que
nace, es precisamente el desarrollo; y el propio vencimiento de lo viejo por lo
nuevo, que surge a base de lo viejo, se llama negación.
El termino negación, lo introdujo Hegel en la filosofía,
pero imprimiéndole un sentido idealista. Según Hegel, la negación se basa en le
desarrollo de la idea, del pensamiento.
Marx y Engels conservaron el término de negación,
interpretándolo de manera materialista. Mostraron que la negación constituye un
momento inseparable del desarrollo de la propia realidad material. En ninguna
esfera puede existir desarrollo que no niegue sus formas precursoras de
existencia. El desarrollo de la corteza terrestre, por ejemplo, paso varias
épocas geológicas, siendo cada nueva época, que surgía a base de la anterior,
determinada negación de la vieja. En el mundo orgánico cada especie nueva de
planta o animal, surgida a base de la vieja, es al mismo tiempo su negación.
Las historia de la sociedad constituye también una cadena de negaciones de
viejos regímenes sociales por nuevos, la sociedad primitiva fue negada por la
esclavista, la esclavista fue negada por la feudal, el feudalismo por el
capitalismo y el capitalismo por el socialismo. La negación es también
inherente al desarrollo del conocimiento, de las ciencias. Cada teoría nueva, más
perfecta, vence a la vieja, menos perfecta. La negación no es traída al objeto
o fenómeno desde el exterior. Es el resultado de su propio desarrollo interior.
Los objetos y fenómenos como ya sabemos, son contradictorios
y, al desarrollarse a base de las contradicciones internas, crean en ellos
mismos las condiciones de su propia destrucción para pasar a otra calidad
nueva, superior. La negación es precisamente la superación de lo viejo a base
de las contradicciones internas, el resultado del autodesarrollo y
automovimiento de los objetos y fenómenos.
Así, hemos aclarado que, como resultado de la negación, se
resuelve una u otra contradicción, se destruye lo viejo y se consolida lo
nuevo. Mas ¿Cesa el desarrollo ahí?, no, el desarrollo no se interrumpe con el
nacimiento de lo nuevo. Lo nuevo no es eternamente nuevo, Al desarrollarse,
prepara premisas y condiciones para el nacimiento de algo más nuevo y avanzado.
Tan pronto como estas premisas y condiciones maduren, vuelve
a manifestarse la negación, esta es ya la negación de la negación, o sea, la
negación de lo que antes venciera a lo viejo, la sustitución de lo nuevo por
algo más nuevo: El novismo. El resultado de esta segunda negación vuelve a ser
negado, vencido y así sucesivamente.
El desarrollo se manifiesta, pues, como incontable multitud
de negaciones que se suceden una a la otra, como una sustitución infinita y
superación de lo viejo por lo nuevo, he ahí el carácter progresivo del
desarrollo.
La afirmación que el carácter progresivo del desarrollo es
el rasgo principal, pero no el único, de la ley de la negación de la negación.
Esta ley no caracteriza el desarrollo como un movimiento rectilíneo, sino como
un movimiento extraordinariamente complejo, algo así como un proceso en forma
de espiral en el que se repiten de cierto modo las etapas recorridas y se
retrocede, en cierto sentido, hacia el pasado.
Es un desarrollo que parece repetir las etapas ya
recorridas, pero de otro modo, sobre una base mas alta (negación de la
negación); un desarrollo que no discurre en línea recta sino en espiral. El
carácter espiral del desarrollo es propio de distintas esferas de la realidad.
La esencia de la ley de negación de la negación en el
desarrollo se produce negando lo viejo por lo nuevo, la inferior por lo
superior. Por cuanto lo nuevo, al negar lo viejo, conserva y desarrolla sus
rasgos positivos, el desarrollo adquiere un carácter progresivo. Al mismo
tiempo discurre en espiral, repitiendo en las fases superiores algunos aspectos
y rasgos de las inferiores.